domingo, 4 de noviembre de 2007

Intersiembra: más producción, mejores resultados, más energía.

No resulta creíble pensar que los precios de los alimentos van a subir eternamente y que nadie se va a preocupar por producir más, tendiendo a equilibrar -como dice la regla- la demanda con la oferta.

Para superar el dilema "Alimentos o Energía" es necesario producir más (aumentando la productividad y las superficies sembradas) y buscando cultivos que no compitan con los alimentos (bioetanol de celulosa, biodiesel de algas, jatropha, tártago y otros).
Pero también es posible pensar en la sumatoria de una combinación de cultivos que produzca más que la suma de los cultivos individuales, a través de un proceso sinérgico: se trata de sembrar en una misma superficie dos o más cultivos simultáneos o desfasados parcialmente, intentando optimizar el uso de los factores y de recursos ambientales.

Se puede pensar -por ejemplo- en términos de intersiembra de cultivos estivales (principalmente soja) en trigo, tecnología que con mejores resultados se usa en el sur de la Provincia de Buenos Aires (http://www.clarin.com/suplementos/rural/2007/11/03/r-01532357.htm ). Cuando el trigo está en etapas avanzadas de desarrollo, se intersiembra soja de segunda. Para ello, es necesario haber dejado líneas de trigo sin sembrar, las que luego se siembran con soja de segunda utilizando la misma sembradora de granos finos especialmente adaptada para este fin.

Pero no es la única opción: se está comenzando a evaluar al maíz como alternativa estival de intersiembra, siendo clave ajustar la fecha de siembra para que, al momento de la cosecha del trigo, el maíz no tenga gran desarrollo. Se destinaría el maíz a la confección de silaje de planta entera, que se puede utilizar en feedlot. También se está evaluando la intersiembra entre dos cultivos estivales como girasol y soja, que aumentaría la eficiencia de uso de la radiación y el agua, pudiendo así repercutir en una mejora de la rentabilidad en esa zona.

En la llamada Zona Núcleo también se está ajustando el manejo de intersiembras de maíz y soja, al igual que en el oeste de Córdoba.

Y los intercultivos también llegaron a la ganadería: con un concepto semejante pero apuntado a la producción de forraje, en Laboulaye se plantan franjas de avena y maíz. y el INTA Pergamino está probando el efecto de cultivar simultáneamente moha y soja, pensando en una dieta más balanceada para los bovinos.

Los policultivos son una nueva realidad en el campo argentino. Lea la nota completa en: http://www.clarin.com/suplementos/rural/2007/11/03/r-01532357.htm