Actualmente, el mundo se encuentra en dentro de un punto de inflexión en cuanto a su futuro. Por un lado, la economía mundial, liderada por la combinación de las potencias económicas (G7) y países en vía de desarrollo, crece a un ritmo bastante satisfactorio del 4% anual. Por el otro, el precio del petróleo en aumento paulatino, surge como una amenaza a mediano plazo (y no tendría miedo en decir, corto plazo). http://www.consumer.es/web/es/economia_domestica/2005/04/17/141256.php
Ante este problema crucial en uno de los pilares del desarrollo, pone al mundo en un paradigma “¿qué medidas tomar para no autodestruirnos?”.
Acá es donde me gustaría poner a través de lo que he aprendido en mi formación académica este caso. Si tomamos al mundo como un “gran sistema” que funciona producto del uso e intercambio de energía, podríamos decir que estamos tendiendo a la entropía absoluta (desorden absoluto), entiéndase “caos”, producto de la falta de integración de la economía con el medio ambiente.
La solución es más que obvia, pero tal vez, producto de los intereses monetarios y el poder económico, recién ahora se está tomando conciencia de esto.
La solución, la “apertura” del sistema “mundo” al uso de energías renovables y al medio ambiente en general.
Las energías renovables y el cuidado del agua, sustancia fundamental para el desarrollo de la vida, son los aspectos primordiales. Estas dos políticas, son las que nos permitirán en un futuro si las seguimos (o el mismo mundo nos obligue a seguirlas), evitar ese caos.
En cualquier mente, pienso yo, entra el siguiente razonamiento al reflexionar con el tema:
Principal fuente de energía para el crecimiento y desarrollo del hombre hoy en día = Petróleo = recurso NO renovable
¿No es muy difícil, verdad?
Por eso, alrededor d mundo y de miles de maneras distintas mucha gente está buscando energías alternativas y principalmente renovables. Muchas de ellas se basan en la aplicación dela biotecnología para el uso de la vida en pos del desarrollo.
Los biocombustibles afloran como “vedette” en este contexto, y son hoy por hoy, la solución funcional más próxima y accesible. No descartar que en un futuro, otras energías con gran potencial como el Hidrogeno, la energía solar o la eólica, también se suban a este podio.
Ahora, para muchas de estas energías, especialmente la de los biocombustibles, va a ser esencial la utilización de agua sin contaminantes, recurso que como el petróleo, está en posible extinción.
Por eso, creo que la conclusión de este artículo nos lleva al titulo. En el futuro, el eje de la economía sustentable no solo va a estar dada por tener una provisión de energía renovable, sino también por la interacción amigable con el agua y el medio ambiente que esta representa. No sirve de nada invertir tiempo y dinero en desarrollar energías renovables que van a alimentar empresas que agoten esos recursos y los vuelvan en contra.
Ezequiel Labarthe
25-9-2007
