lunes, 19 de junio de 2017

Antártida, hielos que lloran.


En 2016 la temperatura de nuestra Tierra subió casi un grado centígrado ( 0,94 exactamente).

No parece demasiado.  Pero como decíamos en este mismo Blog hace ya 7 años (ver Referencias útiles) ese "pequeño" aumento  continúa provocando cambios estructurales en la península Antártica.

Alrededor de este territorio hay una barrera de hielo flotante que se conoce con el nombre de "Larsen C", que fue así llamada en honor al capitán noruego Carl Anton Larsen que en diciembre de 1893 navegó a lo largo de la misma.





En los últimos meses la rajadura en la superficie congelada creció otros casi 30 kilómetros, lo que hace cada vez más probable su desprendimiento del continente. Ya en 1995 y 2002 se habían desprendido otras 2 barreras ("Larsen A" y "Larsen B"), pero la envergadura de ésta es mucho mayor.

¿Se trata de algo muy grave?  Lo que puede esperarse es que enormes icebergs se pongan a flotar en el mar, con lo cual los glaciares que están sobre la tierra ya no tendrán la contención de la barrera por lo que comenzarían a deslizarse hacia el océano.

¿Cambiará solo el mapa de la Antárida?   Ojalá fuera ese el único cambio:  hay científicos que dicen que este iceberg no provocará un aumento en el nivel del mar, ya que en la actualidad ya está flotando.  Pero otros dicen que esos deslizamientos podrían provocar un ascenso en el nivel del mar que algunos estiman hasta de 10 centímetros.

¡A los botes, amigos!



REFERENCIAS ÚTILES:

La enorme grieta de una plataforma de hielo en la Antártida, a punto de quebrarse, publicada en Infobae 1 de junio de 2017

El nivel del mar subiría 10 cm,, publicado en Clarin  el 17/06/2017

Más evidencia, publicada en este Blog el 2 de marzo de 2008